Dolor pélvico. Dolores menstruales fuertes y flujo. Molestia intestinal o de vejiga. Náuseas o vómitos. Infertilidad. Para las 176 millones de mujeres en el mundo que padecen endometriosis, una enfermedad sin causa conocida, la vida puede resultar difícil. La endometriosis no distingue, afecta de la misma manera a mujeres de diferentes razas y contextos socio-económicos. En honor al Mes de concientización nacional sobre endometriosis, Para seguir leyendo analiza la enfermedad en mayor profundidad.
En las mujeres con endometriosis, aparece y crece tejido endometrial fuera del útero, y se adhiere a otros órganos, como el propio útero, los ovarios, las trompas de falopio, el intestino, la vejiga y otras áreas adyacentes. Se cree que estas áreas responden a fluctuaciones hormonales, como lo harían dentro del útero, provocando irritación dentro del cuerpo. En algunos casos crecen adherencias o tejido cicatrizal entre estos implantes, conectando los órganos pélvicos e intensificando probablemente el dolor.
El síntoma más habitual de la endometriosis es el dolor, y el 75 por ciento de las personas diagnosticadas indican diferentes niveles de intensidad. Otros síntomas incluyen períodos menstruales prolongados, dolores menstruales fuertes, dolor durante la relación sexual, dolor en la parte inferior del abdomen, dolor al defecar u orinar e infertilidad.
La cirugía es la única manera de diagnosticar la endometriosis de forma definitiva; sin embargo, se pueden utilizar procedimientos con ultrasonidos y resonancias magnéticas al momento de evaluar los síntomas. La cirugía más habitual es la laparoscópica, un procedimiento en el que el médico observa los órganos pélvicos a través de pequeñas incisiones en el abdomen.
No existe cura para la endometriosis; sin embargo, un médico puede determinar el curso del tratamiento para los síntomas de la endometriosis después de considerar la intensidad de los síntomas, la planificación familiar, edad y gravedad de la enfermedad en la mujer. Las opciones de tratamiento incluyen:
Según la Sociedad Americana para la Medicina Reproductiva, la endometriosis puede hallarse en hasta el 50 por ciento de las mujeres infértiles. Los investigadores creen que la endometriosis altera el área pélvica de modo tal que produce infertilidad en estas mujeres. Mientras que los tratamientos quirúrgicos o médicos para la endometriosis no parecen asociarse con el aumento de fertilidad, muchas mujeres quedan embarazadas después de una intervención quirúrgica o médica.
Si bien se ha investigado mucho acerca de la causa de la endometriosis, hasta ahora no se ha descubierto. Los factores que pueden aumentar el riesgo de una mujer de contraer la enfermedad incluyen antecedentes familiares, disfunción en el sistema inmunológico que evita que el cuerpo destruya el tejido endometrial mal ubicado, posible resistencia del endometrio a la progesterona y exposición a productos químicos como la dioxina. Todos estos factores muestran posibles relaciones con la endometriosis.
Si usted o uno de sus seres queridos presenta dolor pélvico o endometriosis, consulte a un especialista calificado. A pesar de que es posible que los síntomas disminuyan durante el embarazo o después de la menopausia, la endometriosis pueden permanecer y requiere de control médico de por vida.
Referencias: